Nada ganás aniñándome. Tus ansias no mermarán, y mi sabiduría no crecerá.
Tengo una vida plena hermana, una vida con errores, con aciertos, con inseguridades, con certezas plenas. Soy yo, el mismo que ayer estuvo a tu lado, el mismo al cual ayer acompañaste. Soy el mismo que siemrpe dio en tu vida un lugar expiatorio. Soy yo, el mismo de siempre; pero ya no más por favor. Tú misma me lo pides y ni siquiera podemos conciliarlo. Qué triste lo nuestro ! ! y qué apalancado ! ! Qué quieto, qué aplomado en la misma situación de siempre.
Pues no, no sé qué hacer, no sé cómo hacerlo, no sé, sinceramente no sé. Salvémosnos, ambos, salvémosnos y tratemos de ser adultos, de no reclamarnos, de no expíar yo y de no responsabilizarte vos.
Hemos crecido, algunos años han pasado ya desde la última vez. Ambos erramos, ambos fuimos por nuestros malos caminos, ambos acertamos y caminamos firmes hacia una vida llena de amor, de nuevos hijos, de nuevas aventuras, sensaciones. Así y todo ambos tenemos hoy demasiadas piedritas sobre las cuales todavía nuestros pies se lastiman. Ambos sufrimos todavía y ambos seguimos pensando que algún día, de tanto pisarlas, ésas piedritas serán polvo y nuestros pies sanarán completamente.
Aún estamos lejos, aún no sabemos qué hacer, aún seguimos investigando. Pero simplemente dejemos que esto pase, dejemos que nosotros mismos, sin darnos cuenta, nos encarguemos de nosotros mismos; con amor, como siemrpe lo hicimos, pero sin lugares, sin nervios, sin más que siemplemente la confianza plena de saber que el otro (tú y yo) existimos, y estamos el uno para el otro siempre que haga falta, y que no.
Mi corazón quiere ser una palma abierta para tí. Quiere mostrarse sin tapujos y recibir lo mismo. Quiere saber que consejos no son necesarios, quiere saber que lo más importante es que no te duela tanto, y que si lo hace ya no vas a tratar de abarcarme una vez más.
Ya hace un tiempo que descubrí que soy feliz, y hace un tiempo largo que éso no cambia. Confiá, ya no necesito de ti, gracias por todo, si es que gracias corresponden (yo no lo creo). Ahora confiá, aceptá y dejémosnos ser, como siempre lo soñamos.
Fero
BA 22/10/2011 - 17:48
Tengo una vida plena hermana, una vida con errores, con aciertos, con inseguridades, con certezas plenas. Soy yo, el mismo que ayer estuvo a tu lado, el mismo al cual ayer acompañaste. Soy el mismo que siemrpe dio en tu vida un lugar expiatorio. Soy yo, el mismo de siempre; pero ya no más por favor. Tú misma me lo pides y ni siquiera podemos conciliarlo. Qué triste lo nuestro ! ! y qué apalancado ! ! Qué quieto, qué aplomado en la misma situación de siempre.
Pues no, no sé qué hacer, no sé cómo hacerlo, no sé, sinceramente no sé. Salvémosnos, ambos, salvémosnos y tratemos de ser adultos, de no reclamarnos, de no expíar yo y de no responsabilizarte vos.
Hemos crecido, algunos años han pasado ya desde la última vez. Ambos erramos, ambos fuimos por nuestros malos caminos, ambos acertamos y caminamos firmes hacia una vida llena de amor, de nuevos hijos, de nuevas aventuras, sensaciones. Así y todo ambos tenemos hoy demasiadas piedritas sobre las cuales todavía nuestros pies se lastiman. Ambos sufrimos todavía y ambos seguimos pensando que algún día, de tanto pisarlas, ésas piedritas serán polvo y nuestros pies sanarán completamente.
Aún estamos lejos, aún no sabemos qué hacer, aún seguimos investigando. Pero simplemente dejemos que esto pase, dejemos que nosotros mismos, sin darnos cuenta, nos encarguemos de nosotros mismos; con amor, como siemrpe lo hicimos, pero sin lugares, sin nervios, sin más que siemplemente la confianza plena de saber que el otro (tú y yo) existimos, y estamos el uno para el otro siempre que haga falta, y que no.
Mi corazón quiere ser una palma abierta para tí. Quiere mostrarse sin tapujos y recibir lo mismo. Quiere saber que consejos no son necesarios, quiere saber que lo más importante es que no te duela tanto, y que si lo hace ya no vas a tratar de abarcarme una vez más.
Ya hace un tiempo que descubrí que soy feliz, y hace un tiempo largo que éso no cambia. Confiá, ya no necesito de ti, gracias por todo, si es que gracias corresponden (yo no lo creo). Ahora confiá, aceptá y dejémosnos ser, como siempre lo soñamos.
Fero
BA 22/10/2011 - 17:48
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